jueves, 7 de julio de 2016

XXII aniversario del deceso de Kim Il Sung


 Se trata del 8 de julio, fecha del fallecimiento de Kim Il Sung (1912-1994), Presidente de la República Popular Democrática de Corea.
Con motivo de este aniversario los coreanos y otros progresistas del mundo evocan con profunda emoción la vida de Kim Il Sung que con las destacadas ideas y teorías y las descomunales prácticas revolucionarias, realizó sempiternos méritos ante la historia y la humanidad.
Él nació en el seno de una pobre familia campesina al comienzo del siglo pasado cuando el país estaba bajo la ocupación militar (1905-1945) del imperialismo japonés.
A la edad de poco más de 10 años, para salvar el destino del país y el pueblo, emprendió la lucha revolucionaria y durante el empeño para buscar un verdadero camino por seguir concibió la idea Juche (la idea de que uno es dueño de su destino y capaz de forjar esto) y la Songun (la de priorizar los asuntos militares). Luego, en los 70 años en los que conducía la revolución, aplicándolas con éxito, manifestó su veracidad y vitalidad ante el mundo y logró que aquellas fueran grandes ideas rectoras para asegurarles la independencia a las masas populares, como valiosos bienes espirituales de los seres humanos.
Con su distinguida dirección implantó en Corea un régimen social centrado en las masas populares que serviría de un buen modelo para la realización de la causa por la independencia de la humanidad.
Habiendo liberado el 15 de agosto de 1945 el país con la Lucha Armada Antijaponesa de 15 años, de seguida fundó el 10 de octubre del mismo año, el Partido del Trabajo de Corea, realizó con éxito la revolución democrática de carácter antimperialista y antifeudal y a base de esto instauró la RPD de Corea. Y condujo hacia la victoria la Guerra de Liberación de la Patria (guerra coreana de 1950-1953) para defender la soberanía y la dignidad nacionales de la invasión de las fuerzas aliadas imperialistas acaudilladas por Estados Unidos, así como la rehabilitación y construcción de postguerra, la revolución socialista y la construcción socialista de varias etapas, convirtiendo el país en un país socialista centrado en las masas populares, independiente en la política, autosostenido en la economía y autodefensivo en la salvaguardia nacional.
Realizó gran mérito también para la reintegración de la dividida nación. Planteó los tres principios de la reunificación de la patria, la proposición de la fundación de la República Confederal Democrática de Coryo, el Programa de Diez Puntos de la Gran Unidad Pannacional y otras justas y racionales propuestas para la reunificación e impulsó con pujanza el movimiento por la reintegración de la nación, abriéndole espléndida perspectiva a esta magna obra.
Hizo gran contribución también a la independización del mundo. Lanzó el lema “¡Nos unámonos con los del mundo que pretenden la independencia!”, ayudó exhaustiva y sinceramente la independencia de muchos países y su desarrollo independiente e hizo apasionados esfuerzos para que el movimiento socialista, el Movimiento de los No Alineados y otros progresistas mantuvieran firmemente su ideal y principio.
Fue la más eminente personificación de las virtudes humanas. Estimó y respetó mucho al hombre y a las masas trabajadoras.
Los entrevistados con él se quedaron todos encantados y guardaron en lo hondo de su corazón el sentimiento de adoración hacia él.
Luise Rinser, diligente católica y escritora alemana, dijo que él era “ser divino, sin importar que lo reconociera o no” y Jimmy Carter, ex presidente estadounidense, que él era más grande que el conjunto de George Washington, Thomas Jefferson y Abraham Lincoln calificados como los más ilustres en la historia de Estados Unidos.
Kim Il Sung fue, de veras, el más distinguido dirigente, el gran hombre sin igual y el virtuoso que representó el siglo XX.
Falleció, pero su ideología y sus méritos son heredados continuamente.
Los coreanos lo tienen como cuando estaba vivo y como eterno Presidente de la República. La idea Juche y la Songun presentadas por él son las eternas rectoras del pueblo coreano, cuya invariable disposición y voluntad es avanzar de continuo por el camino de la independencia, el Songun y el socialismo.
A finales del siglo pasado cuando el socialismo coreano, debido al deceso de  Kim Il Sung que era para la nación coreana un gran martirio, la concentrada ofensiva para estrangularlo de las fuerzas aliadas imperialistas que realizaron aprovechando el desplome del socialismo en varios países y las sucesivas calamidades naturales, se encontraba en las pésimas condiciones, el pueblo coreano, enarbolando más la bandera del Songun, se alzó con bravura en la lucha antimperialista y antiyanqui y defendió el socialismo. Además, incluso preparó el trampolín para hacer realidad el deseo de Kim Il Sung, alcanzar la gran meta de la construcción de un Estado socialista, poderoso y próspero. Desde entonces hasta la fecha en Corea acaecieron continuamente múltiples maravillas, capacitándose el país para fabricar y lanzar el satélite artificial y poseer armas nucleares.
Como efecto de las líneas y los proyectos de la reunificación independiente planteados por Kim Il Sung, en la Península Coreana se abrió la era de la reintegración del 15 de Junio sustentada en el ideal de “entre nosotros, los connacionales” y la reunificación entró en la fase trascendental. Corea se empeñó en llevar a feliz término la obra de independizar todo el mundo enunciada por      Kim Il Sung, haciendo gran contribución al restablecimiento del movimiento socialista internacional y su progreso y la realización de la causa mundial antimperialista y por la independencia.
Muchos hombres del mundo continuamente alaban los imperecederos méritos y nobles rasgos de Kim Il Sung y veneran a este.
Continúa con solemnidad el Festival Artístico de Amistad Abril en Primavera que se efectuaba con motivo del aniversario de su nacimiento en Pyongyang. Todos los años, en ocasión de este aniversario y el de su fallecimiento, tienen lugar en muchos países reuniones recordatorias, mítines conmemorativos, conferencias, exposición de los libros y las fotos y otros actos. En abril de 2012, con motivo de centésimo aniversario de su nacimiento, en Pyongyang, se efectuó con solemnidad la conferencia mundial de la idea Juche con la participación de los partidarios de esta idea de muchos países. A él los dirigentes y otros sectores de varios países le ofrecen continuamente títulos honoríficos, ordenes, medallas y regalos.

La ideología y los méritos de Kim Il Sung son perpetuos, sempiternos.