jueves, 30 de octubre de 2014

MINREX denuncia intento de aprobar "resolución de DDHH" anti-RPDC




    Pyongyang, 30 de octubre (ACNC) -- El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Popular Democrática de Corea hizo pública el día 30 una declaración con respecto a que coincidiendo en tiempo con el inicio del enfrentamiento total de Estados Unidos contra la RPDC, se torna más grave en este año la campaña de las fuerzas hostiles para aprobar la "resolución de DDHH" contra la RPDC.
    A fin de fomentar constantemente el disfrute de derechos humanos de las masas populares, hemos realizado sinceros esfuerzos por promover el diálogo y la cooperación internacionales en el dominio de DDHH, comienza la nota y continúa:
    Recientemente, hemos dado el gesto indulgente de considerar positivamente el problema de sostener el diálogo de DDHH, que se había congelado debido a la actitud unilateral de la Unión Europea (UE), y la visita del "relator especial" de la ONU sobre la situación de DDHH de la RPDC. Además, hemos consentido la visita a nuestro país del representante plenipotenciario de la UE encargado de DDHH y expresamos a la oficina de alto comisionado de la ONU para los derechos humanos la voluntad de aceptar la cooperación técnica.
    Sin embargo, no se realizan el diálogo y la cooperación internacionales en esa esfera debido a la política hostil de EE.UU. que pretende manchar la imagen de la RPDC dando destaque al "problema de DDHH" y derrocar su régimen.
    Por conducto de su secretario de Estado, EE.UU. hizo convocar en la ONU la llamada "reunión de alto nivel sobre la situación de DDHH del Norte de Corea" e impidió la participación en ella de la RPDC por el temor a la revelación del secreto de ese sucio debate político. Ese país orquestó también la campaña de críticas a la RPDC involucrando a las basuras humanas conocidas como "fugitivos norcoreanos" que cometieron imperdonables crímenes y huyeron abandonados por sus paisanos y parientes.
    EE.UU. hace vista gorda de los sinceros esfuerzos de la RPDC y está desesperado por mantener el ambiente de presión internacional contra ella presentando pretextos injustos, porque tiene miedo a que el diálogo y la cooperación de la RPDC con la sociedad internacional en el tema de DDHH fomenten más el disfrute de DDHH del pueblo coreano y eleven más el prestigio exterior de ella.
    Si la Unión Europea aprueba forzadamente el "proyecto de resolución de DDHH" anti-RPDC más cruel que antes, sumándose al malsano intento de EE.UU., perderá para siempre la oportunidad de tratarse con la RPDC en ese tema y se producirán consecuencias imprevisibles.
    Nos esforzaremos en todo lo posible por defender el régimen socialista al estilo coreano, donde se da primacía a las masas populares, y por consolidarlo y desarrollarlo aun más.

jueves, 2 de octubre de 2014

Autoridades surcoreanas deben apoyar proyecto de reunificación federal


Hace 34 años el Gran Líder presidente Kim Il Sung dio la solución al problema de la reunificación de la península Coreana hoy seguimos apoyando fuertemente esa posición que sería la solución armónica y pacífica a este conflicto que fue causado por las potencias imperialistas de aquella época, por lo cual instamos a l goberno sur coreano a discutir de forma clara y sin intervención esta propuesta que es la más viable en la solución de este tema.
Atte. 

Yuri Castro Romero 
Sec. Gral. del instituto Peruano coreano


Pyongyang, 1 de octubre (ACNC) -- El portavoz del Instituto de Desarme y Paz del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Popular Democrática de Corea hizo pública el día primero la siguiente declaración:
    Poco después, celebraremos el 34º aniversario de la presentación del proyecto de fundación de la República Federal Democrática de Coryo por el Presidente
Kim Il Sung, eterno Sol de la nación coreana.
    El Presidente la expuso el 10 de octubre del 69 (1980) de la Era Juche en el histórico VI Congreso del Partido del Trabajo de Corea e iluminó el más correcto rumbo y remedios para la realización de la reunificación de la patria.
    La propuesta toma por contenido principal fundar un gobierno unido nacional en el que el Norte y el Sur, sobre la base del reconocimiento y tolerancia recíprocos de las ideologías y regímenes existentes, instruyan un estado unido nacional con la participación igualitaria y, bajo la jurisdicción de este gobierno, ejerzan autonomía regional con iguales facultades y obligación.
    En las condiciones de que en el Norte y el Sur de Corea existen durante casi 70 años diferentes ideologías y regimenes y ambas partes mantienen sus sistemas, el proyecto de sistema federal constituye la más real de reunificación que posibilita realizar de manera pacifica e imparcial la reunificación del país conforme a la voluntad, demanda e interés de toda la nación coreana.
    El Dirigente
Kim Jong Il, quien presentó como sagrado deber nacional la realización brillante de esa empresa en acato al propósito del Presidente, ofreció con el sublime amor a la nación la época del 15 de junio para la reunificación y abrió una clara perspectiva para el particular.
    En la Declaración Conjunta del 15 de Junio, el Norte y el Sur de Corea reconocieron que tienen los puntos comunes entre la propuesta de federación de la etapa baja de la parte Norte y la de confederación de la parte Sur y acordaron orientar la reunificación en ese rumbo.
    Esto es el acuerdo logrado solamente por ambas partes en la larga historia de la división nacional en relación con el modo de la reunificación, lo cual fue apoyado y aplaudido unánimemente por parte de todos los connacionales y la sociedad internacional.
    Hoy en día, bajo la dirección del Mariscal
Kim Jong Un quien apoya el legado de los grandes Generalísimos alusivo a la reunificación de la patria, el gobierno de la RPDC hace ingentes esfuerzos por la mejora de las relaciones del Norte y el Sur y la reunificación de la patria.
    Pero, el deseo y los esfuerzos de toda la nación por la reunificación del país se tropiezan con el desafío grave de las fuerzas anti-reunificación y se interponen todavía un gran obstáculo y dificultades.
    Ahora en la Península Coreana perdura el estado de división, lo cual no se debe a la carencia de remedios de reunificación sino a las maniobras de la "reunificación mediante la absorbición" de las autoridades surcoreanas tendentes a internacionalizar este problema interno de la nación abogando por supuestas "teorías de unificación" de varios tipos para mantener el poder cada vez que cambiaba el "gobierno" en el Sur de Corea.
    La actual autoridad surcoreana Park Geun-hye enumera sofismas como "proceso de confianza de la Península Coreana" y "Declaración de Dresden" discutiendo aquí y allá sobre el asunto de reunificación.
    Para colmo, ella puso abiertamente su ambición de "reunificación mediante la absorbición" relacionando a la fuerza el problema de reunificación de nuestro país con la unificación de Alemania hasta en la escena de la ONU.
    Tales conductas devienen el desprecio sobre la contraparte, muestra de la política conflictiva y provocación grave.
    La peligrosidad de las maniobras, a que recurren las autoridades surcoreanas, no solamente reside en repetir la campaña conflictiva del predecesor sino también en perseguir el objetivo malsano de poner en auge el ambiente anti-RPDC mediante la "cooperación internacional" soñando con la "reunificación mediante la absorbición" que causará sólo la confrontación fratricida y la guerra en la Península Coreana.
    Si la sociedad internacional desea la paz, la estabilidad y la reunificación de esta región, debe darse clara cuenta de que el actual enfrentamiento Norte-Sur es el de medio de reunificación y de que el intento anacrónico de las autoridades surcoreanas desencadenará sólo la guerra y apoyar el proyecto de reunificación mediante la fórmula federal, acordado entre ambas partes de Corea.
    Si las autoridades surcoreanas tienen de verdad interés en la reunificación, no deben discutir sobre la reunificación en el extranjero sino aclarar su posición de aceptar o no el debate nacional sobre el asunto de reunificación por el medio federal, ya acordado entre el Norte y el Sur.
    Haremos ingentes esfuerzos invariables por abrir el camino de la reunificación independiente frustrando con las fuerzas unidas de todos los coreanos las maniobras de los títeres surcoreanos que recurren a la imprudente campaña conflictiva en contubernio con las fuerzas extranjeras, sin hacer caso de los intereses de la nación.

“Derrotemos al imperialismo”



Hace casi 90 años los revolucionarios coreanos de la nueva generación presentaron esta consigna. Lo reclamó precisamente la Unión para Derrotar al Imperialismo (UDI) fundada el 17 de octubre de 1926, que fue primera organización revolucionaria instituida por Kim Il Sung (1912-1994), Presidente de la República Popular Democrática de Corea y fundador de la Corea socialista.
Habiendo emprendido a la edad de poco más de 10 años la lucha revolucionaria a mediados de la década de 1920 cuando el país estaba bajo la ocupación militar (1905-1945) de Japón, se percató de que con el anterior movimiento nacionalista y comunista no era posible lograr la liberación y la independencia del país.
En eso los nacionalistas, bajo el rótulo del “rescate de la estatalidad”, hablaron mucho de la independencia del país, sin presentar vías correctas para realizarla. Lejos de convocar a las grandes masas a la lucha antijaponesa, intentaron apoyarse en las fuerzas extranjeras para alcanzar la independencia. También los seudocomunistas, autodenominándose cada cual “élite”, se entregaron a la pugna sectarista y vagaron para recibir la autorización de la Internacional.
De esta manera no es posible alcanzar nunca la liberación y la independencia del país, pensó Kim Il Sung y se decidió a allanar un nuevo camino por seguir la revolución coreana.
El que entonces cursaba el estudio en la escuela Hwasong, la militar-política en el noreste de China, instaurada por los independentistas e ilustrados patrióticos de Corea, con el objetivo de encontrar un nuevo camino de la lucha, leyó con afán las escrituras de Marx y Lenin y se las explicó y propagó activamente a los jóvenes estudiantes avanzados. Frecuentemente organizó simposios sobre los temas socio-políticos, unificando el criterio y la posición de los jóvenes estudiantes con respecto a la revolución coreana.
En este curso llegó a convencer de que para independizar el país se debía apoyar en las masas populares y no en algunos tantos de la capa superior, y en la fuerza autóctona y no en la extranjera.
Ganó a los compañeros que compartían la ideología y el propósito y pensó agruparlos en una organización.
Hizo completos preparativos y el 17 de octubre de 1926 en una modesta casa del distrito Huadian de la provincia de Jilin convocó una reunión para instaurar la Unión para Derrotar al Imperialismo y discursó bajo el título “Derrotemos al imperialismo”.
Como la UDI era, al pie de la letra, una organización para desbaratar a todos los imperialismos, también el lema lanzado por ella, fue estupendo.
Posteriormente, Kim Il Sung, en su Memorias En el Transcurso del Siglo escribiera:
“Fue tarea inmediata de la UDI derrotar al imperialismo japonés y lograr la liberación y la independencia de Corea, y su objetivo final radicaba en la construcción del socialismo y el comunismo aquí, y, a la larga, destruir a todos los imperialismos y realizar el comunismo en el mundo.”
Se trataba, en realidad, no solo de la proclamación de la guerra de vida o muerte para echar abajo al imperialismo japonés, sino también de la declaración del enfrentamiento con todos los imperialismos del planeta.
La fundación de la UDI hizo posible que la revolución coreana tuviera clara meta de lucha y estrategia y avanzara por un nuevo camino de desarrollo y el pueblo coreano mismo se responsabilizara de su destino y lo fraguara con su propia fuerza.
La revolución coreana así estrenada siempre ganó la victoria en su enfrentamiento con el imperialismo durante unos 90 años.
Bajo la dirección de Kim Il Sung los revolucionarios coreanos libraron la Lucha Revolucionaria Antijaponesa de 20 años y derrotaron al imperialismo japonés, liberando el país el 15 de agosto de 1945.
Posteriormente cuando Estados Unidos, con el objetivo de estrangular a la joven RPD de Corea (fundada el 9 de septiembre de 1948) en su cuna, desencadenó la guerra coreana (1950-1953), el ejército y el pueblo de Corea, haciendo heroica resistencia, le asestó al invasor que se jactaba de su “supremacía” en el mundo la ignominiosa derrota que fue para él la primera en su historia y defendieron con honor la soberanía y la dignidad nacionales.
También después del cese al fuego Corea puso gran empeño en el fortalecimiento de la capacidad defensiva nacional, para lo cual materializó una línea de simultanear la construcción económica y la de la defensa nacional, hizo de todo el ejército el de cuadros, lo modernizó, armó a todo el pueblo y fortificó todo el país, y siempre ganó agudos enfrentamientos políticos y militares con Estados Unidos como los casos del “Pueblo”, barco espío armado norteamericano (enero de 1968), del “EC-121”, avión espía norteamericano de gran envergadura (abril de 1969) y de Panmunjom (agosto de 1976).
Además, Corea ayudó activamente a muchos países coloniales africanos en la lucha de liberación nacional y Cuba, Vietnam y varios otros países en la lucha antimperialista, haciendo gran contribución a la realización de la causa antimperialista mundial.
A finales del siglo pasado el pueblo coreano, aun ante las vicisitudes sin precedentes acaecidas por la concentración en el país de la ofensiva antisocialista de las fuerzas aliadas imperialistas acaudilladas por Estados Unidos que lanzaron aprovechando el desplome de varios países socialistas, bajo la bandera del Songun (priorización de los asuntos militares) enarbolada por Kim Jong Il, Presidente del Comité de Defensa Nacional de la RPD de Corea, defendió firmemente el socialismo y hasta abrió el paso para la construcción de un Estado socialista, poderoso y próspero. Corea ha sido reconocida por la sociedad internacional como el baluarte antimperialista que nadie se atreviera a tocar y destruyera con nada.
La causa antimperialista iniciada por la UDI se lleva adelante irrefutablemente por Kim Jong Un, Dirigente de la RPD de Corea, quien, frente a la insensata intimidación con armas nucleares de Estados Unidos, planteó una línea de fomentar simultáneamente la construcción económica y la preparación de las fuerzas armadas nucleares y fortalece más el potencial militar nacional en todos sus aspectos, desbaratando con resolución las maquinaciones de agresión de Estados Unidos y sus seguidores.
Corea está dispuesta no solo a no perdonar ni en lo mínimo la coacción y la arbitrariedad de los imperialistas sino también a arrasar completamente a todo trance el reducto del imperialismo, promotor de la agresión y la guerra, lo cual inculca gran confianza y valor en los pueblos progresistas del mundo que reclaman el antimperialismo y la independencia.

La causa antimperialista estrenada por la UDI se realizará indudablemente.

Para hacer realidad el deseo del pueblo



Vivir comiendo arroz cocido y sopa con carne, con vestido de seda, en una casa con tejas, este fue el deseo secular del pueblo coreano, que no pudo verse realizado debido a los grilletes feudales de varios milenios y la esclavitud colonial de varios decenios (ocupación militar de Japón de 1905 a 1945) a los que estaba sometido.
Este sueño se hizo realidad después de la liberación del país (15 de agosto de 1945) merced al Partido del Trabajo de Corea, fundado el 10 de octubre de 1945.
El Partido instituyó el Poder popular (Comité Popular Provisional de Corea del Norte, antecedencia de la República Popular Democrática de Corea, en febrero de 1946) y dispuso que este realizara antes que nada las reformas democráticas. Como resultado, en Corea se publicaron sucesivamente la Ley de la Reforma Agraria (5 de marzo de 1946), la Ley del Trabajo (24 de junio de 1946), la Ley de la Igualdad de los Derechos del Hombre y la Mujer (30 de julio de 1946), la Ley de la Nacionalización de las Industrias Principales (10 de agosto de 1946), etc. En virtud de las reformas democráticas los campesinos recibieron gratis las tierras, donde con sus propios recursos lograron cosecha abundante, y llevaron una nueva vida, la feliz; los obreros llegaron a ser dueños de la fábrica, de los medios de producción, fueron liberados de la explotación y opresión e hicieron la jornada de 8 horas, y las mujeres fueron liberadas de las trabas feudales y libraron a sus anchas las actividades sociales, llegando a ser hasta las diputadas a la Asamblea Popular Suprema (parlamento).
Bajo la orientación del PTC, la RPD de Corea se hizo un país donde se verifica todo el sueño y deseo del pueblo.
La RPD de Corea implantó en enero de 1953 cuando la guerra coreana (1950-1953) desatada por la invasión de Estados Unidos estaba en su apogeo, momento crítico en el que se decidiría el destino del país, la asistencia médica gratuita general que requiere gran cantidad de recursos humanos y materiales del país, lo cual fue la resolución del PTC que en todo momento concede preferencia a la salud y vida de las personas y pretende poner en ejecución cuanto antes el deseo secular del pueblo de disfrutar de la asistencia médica sin preocupación por el pago.
Lo mismo se da con la enseñanza obligatoria general gratuita vigente en Corea. Este país, pese a que cumplía la difícil tarea de la rehabilitación y construcción de postguerra para escombrar los estragos de la guerra, realizó en agosto de 1956 la enseñanza primaria obligatoria general y de seguida, en abril de 1959, la enseñanza general gratuita. Además, a medida que la construcción socialista se impulsaba, la enseñanza obligatoria y gratuita fue llevada a la etapa superior, llegando al nivel más alto en el mundo. Con esto se ejecutó completamente el deseo de largo tiempo de las personas de instruir cuanto quieren a sus hijos sin la preocupación por los gastos de estudio.
En Corea en 1974 el régimen tributario fue revocado por completo, y se hizo realidad el deseo secular de las personas de vivir sin conocer los impuestos.
A finales del siglo pasado cuando varios países socialistas se desmoronaron en serie y la ofensiva de las fuerzas aliadas imperialistas que tomaban anteriormente contra los países socialistas en conjunto se concentraba en la RPD de Corea, el PTC, aun ante los contratiempos y vicisitudes sin precedentes, no renunció a su misión: hacer realidad el sueño del pueblo. Enarbolando más la bandera del Songun (priorización de los asuntos militares) no solo defendió firmemente el socialismo, fuente de la felicidad del pueblo, sino que hizo explotar la máquina herramienta de control numérico por computadora, tecnología de punta, extender y estandarizar todas las tierras del país y lanzar satélites artificiales de la Tierra, haciendo posible que el país entrara en una nueva era de la construcción de un Estado socialista, poderoso y próspero.
Los coreanos, imaginando este futuro Estado descrito por el PTC, sienten otro anhelo.
Este deseo no es ilusión en modo alguno ni una cosa que será verificada mucho tiempo después.
Lograr que nuestro pueblo, el mejor en el mundo y que ha seguido fielmente al Partido aun superando múltiples dificultades, no sufra otra vez el hambre, sino que disfrute plenamente de la riqueza y prosperidad socialistas, esta es la firme decisión del PTC.
Según el propósito y la determinación del partido, ahora en Corea se levantan muchas construcciones monumentales. Se han levantado la Estación de Esquí Masikryong, el Club de Equitación de Mirim, el Complejo de Piscinas de Recreación de Munsu y otras creaciones, todos de categoría mundial, en los que las personas se benefician cuanto quieren con la cultura socialista. En las áreas residenciales de Changjon y de los científicos de Unha, los edificios de viviendas de los pedagogos de la Universidad Kim Il Sung y otras casas modernas, los habitantes llevan una vida feliz. En la Fábrica Textil Kim Jong Suk de Pyongyang los obreros, viviendo en el albergue fabril como el hotel de lujo, sienten plenamente el verdadero valor y la utilidad del trabajo. El Campamento Internacional de Niños de Songdowon en la pintoresca costa oriental de Corea se ha remozado como una construcción de superior nivel mundial donde se hace realidad plenamente el sueño de los niños.

No es casual que el pueblo coreano confía su destino y hasta su porvenir en el PTC y sigue invariablemente y con fidelidad la dirección de este.

“UDI” y Partido del Trabajo de Corea



El 17 de octubre de 1926 se fundó la Unión para Derrotar al Imperialismo (UDI), lo cual constituyó una declaración histórica que anunció la nueva partida de la revolución coreana y un acontecimiento trascendental que preparó un motivo para imprimirle un viraje radical al empeño para fraguar el destino del pueblo coreano.
Se trata de la primera organización revolucionaria formada por Kim Il Sung (1912-1994), Presidente de la República Popular Democrática de Corea, cuando Corea estaba bajo la ocupación militar (1905-1945) de Japón. En eso él sintió profundamente que con el anterior movimiento comunista caracterizado por la pugna por la hegemonía, los litigios sectaristas, el servilismo a las grandes potencias y el dogmatismo no era posible independizar el país e incorporando a los jóvenes revolucionarios de la nueva generación con los que compartía la ideología y el propósito mientras hallaba un nuevo camino de la lucha, fundó la UDI, que tuvo como su tarea inmediata derrotar al imperialismo japonés y lograr la liberación y la independencia del país y como su objetivo final construir el socialismo y el comunismo en el país y a la larga, desbaratar a todo el imperialismo y construir el comunismo en el mundo.
Desde entonces transcurrieron unos 90 años en los que la revolución coreana y el pueblo coreano han avanzado por el camino de la independencia, el Songun (priorización de los asuntos militares) y el socialismo, siempre ganando victorias.
El principio de la independencia que la UDI mantuvo, es el del Partido del Trabajo de Corea al que se atiene invariablemente en su construcción y sus actividades.
El PTC, siempre manteniendo firmemente la independencia, ha fomentado la política, la milicia, la economía, la cultura y otras actividades según su propio juicio y criterio y a su manera. Para resolver cualquier problema ha rechazado la coacción e intervención extranjeras y preferido a la actualidad de su país y el interés de su pueblo, cuya prueba son la opción por la democracia de su estilo y no de otro país hecha después de la liberación del país (agosto de 1945) para la construcción de una nueva sociedad, la presentación de una original línea de la construcción económica de fomentar desarrollar primero la industria pesada y simultanear el desarrollo de la ligera y la agricultura hecha después de la guerra coreana (1950-1953) desencadenada por la invasión estadounidense cuando lo todo estaba arrasado, el mantenimiento de la línea de la construcción de la economía nacional independiente hecho negando la exigencia de los chovinistas de gran potencia de ingresarse en la CAME, etc.
Gracias a que él mantuvo consecuentemente el principio de la independencia, a finales del siglo pasado cuando varios países socialistas se derrumbaban sucesivamente, al contrario del agüero de los imperialistas de que también Corea correría el mismo destino, ella pudo marchar sin titubeo alguno y con pasos firmes por el camino del socialismo.
La idea y línea de la revolución mediante el Songun que tiene su origen en la UDI, deviene el eterno camino verdadero por seguir el PTC, que desde los primeros días desde su fundación, encauzó primordial fuerza en la construcción del ejército y el fortalecimiento y desarrollo de este.
La joven RPD de Corea que llevaba menos de 2 años de fundada desbarató la invasión armada de Estados Unidos que se jactaba de su “supremacía” en el mundo para estrangularla en la cuna y defendió honrosamente su libertad e independencia, lo cual se debió enteramente a la constante verificación de la idea y línea Songun por el PTC.
Después del cese al fuego Corea, frente a las interminables intimidaciones y atentados militares de Estados Unidos, presentó una línea de fomentar a la vez la construcción económica y la de la defensa nacional y canalizó gran fuerza en el aumento del potencial militar. Como resultado, su ejército y pueblo siempre venció al imperio, lo cual fue comprobado por el caso del “Pueblo”, barco espía armado estadounidense, y el del “EC-121”, avión espía estadounidense de gran envergadura, todos acaecidos en los años de 1960, y el de Panmunjom en los de 1970.
En la década de 1990 del siglo pasado cuando las fuerzas aliadas imperialistas acaudilladas por Estados Unidos, aprovechando el derrumbamiento de varios países socialistas, lanzaban ofensiva sin precedentes contra Corea para estrangularla, el PTC definió la política del Songun como la forma principal de la política socialista y concentró mayor fuerza en el fortalecimiento del potencial militar nacional. Bajo su dirección el Ejército Popular de Corea se ha hecho un poderoso, invencible ejército no comparable con ninguno en la ideología y disposición y preparado tanto para la defensa como para el ataque. Ante las incesantes provocaciones de Estados Unidos y sus agravantes intimidaciones con armas nucleares, Corea se ha dispuesto hasta de la autodefensiva capacidad disuasiva, de manera que nadie se atreva a tocarla.
Según el gran ideal y propósito propuestos por la UDI, el PTC constantemente construye y fortalece el socialismo.
Merced a su dirección, la RPD de Corea se ha convertido en un país socialista centrado en las masas populares donde el pueblo es dueño del todo y todo está a su servicio, donde no hay la explotación y opresión del hombre por el hombre ni ricos y pobres. Aquí, a todos los miembros de la sociedad se les aseguran no solo la libertad y los derechos políticos sino también los derechos al trabajo y el descanso; se han implantado la asistencia médica y la enseñanza obligatoria, todas gratuitas y generales, y todos tienen aseguradas por el Estado y la sociedad las condiciones necesarias para la alimentación, la vestimenta y el alojamiento, llevando la vida equitativa y estable.
El PTC que a finales del siglo pasado, en las pésimas condiciones había defendido el socialismo, ahora convoca a la construcción de un Estado socialista, poderoso y próspero, a los ciudadanos, quienes logran todos los días éxitos que asombran al mundo. Solo en los últimos años dispuso construir el Club de Equitación de Mirim, el Complejo de Piscinas de Recreación de Munsu, la Estación de Esquí Masikryong y otros establecimientos de servicio público de nivel mundial, donde suenan algazaras de las personas.

Siempre al PTC que avanza invariablemente por el camino de la independencia, el Songun y el socialismo, allanado por la UDI le están prometidas solo la victoria y la gloria.

Invencible Partido del Trabajo de Corea



El 10 de octubre es fecha de la fundación del Partido del Trabajo de Corea. Justamente este día de 1945 de hace unos 70 años fue constituido el PTC, que es organizador y orientador de toda la victoria del pueblo coreano.
El PTC tiene el kimilsungismo-kimjongilismo, cuya quintaesencia son la idea Juche y la Songun como su ideología rectora.
La Juche de que el dueño de la revolución y su construcción son las masas populares y la fuerza que las impulsa la tienen también estas, y la Songun de priorizar los asuntos militares y tomar al ejército por el grueso para impulsar la revolución y su construcción son planteadas por Kim Il Sung, Presidente de la República Popular Democrática de Corea en junio de 1930 cuando Corea estaba bajo la ocupación militar (1905-1945) de Japón.
Desde entonces la revolución coreana, bajo la bandera de estas ideas, ha recorrido la trayectoria coronada de victorias.
Kim Jong Il, Presidente del Comité de Defensa Nacional de la RPD de Corea, heredero de la ideología y causa de Kim Il Sung, durante todo el tiempo en el que dirigía el Partido, verificó al pie de la letra las mencionadas ideas.
Tempranamente presentó una orientación de identificar a toda la militancia con el kimilsungismo, la ejecutó constantemente y después de deceso (8 de julio de 1994) de Kim Il Sung, definió, lo mismo que la idea Juche, también la Songun como la gran idea rectora del PTC y procuró que la construcción de este y sus actividades respondieran estrictamente al postulado de la idea Juche y la Songun. Como resultado, el PTC se ha hecho más poderoso, un organismo ideológicamente puro, impregnado plenamente solo de la idea Juche y la Songun, y que aun ante los avatares de toda ralea de la historia mantiene invariablemente su principio. Precisamente he aquí una de las razones importantes por las que él, a finales del siglo pasado, pese a las extremadas maquinaciones de aislamiento y supresión de las fuerzas aliadas imperialistas mantuvo invariablemente, sin ningún titubeo ni desviación, el socialismo. Quisiera subrayar que la idea Juche y la Songun son reconocidas ampliamente por los pueblos progresistas del mundo como el ideal directivo de la causa de independencia de la humanidad.
El PTC es unido y cohesionado férreamente.
La unidad y cohesión del partido es lo fundamental que determina la invencibilidad y el poderío de este.
La unidad y cohesión del PTC, cuya base fue preparada por su fundador    Kim Il Sung, se han consolidado por Kim Jong Il, quien concedió gran importancia a hacer la unidad y cohesión orgánico-ideológicas del Partido basadas en una ideología y la pureza de la obligación moral como un monolito y se empeñó para lograrlo.
La sólida unidad y cohesión del PTC fue llevada a una fase más alta por la política del Songun practicada plenamente por Kim Jong Il a mediados de la década de 1990. A base del espíritu revolucionario de los militares, ellos y el pueblo se identificaron en la ideología y el estilo de obrar y toda la sociedad se preparó como una poderosa fuerza política, llevando la unidad monolítica de la sociedad a una fase extraordinariamente alta.
Por eso, el PTC, cuando los partidos comunistas y obreros de otros países sufrían la división y desintegración, no se mostró titubeante ni en lo mínimo sino que marchó derecho por el camino del socialismo.
El PTC disfruta del absoluto apoyo y confianza de los ciudadanos porque se abniega para ellos.
Confiarse en el pueblo y apoyarse en este siempre lleva a la victoria, pero estar alejado de aquél y abandonado por él, a la derrota, esta fue la máxima de       Kim Il Sung.
Kim Jong Il que la había encarnado tal como era, se interesó especialmente por lograr que el PTC fuera partido madre que atendiera bajo su responsabilidad el destino del pueblo. Pretendió que líneas y políticas que se establecieran, aunque fuera una, reflejaran al máximo la aspiración y la exigencia de las masas y lanzó lemas como ¡Todo el Partido, a compenetrarse con las masas! Y ¡Servir al pueblo!, convocando a todos los trabajadores partidistas a que siempre se confundieran con las masas y les sirvieran fielmente. Logró que el país, por muy difícil que fuera la situación económica en la que se encontraba, practicara invariablemente las políticas populares como la asistencia médica y la enseñanza gratuitas.
Kim Jong Un, Primer Secretario del PTC, que lleva adelante, sin desviación alguna, la ideología y la causa de Kim Il Sung y Kim Jong Il, lanzó como el lema del Partido ¡Todo para el pueblo, todo apoyándose en las masas populares! y practica cabalmente la política de amar al pueblo, de apreciar a este. Bajo su dirección hoy en Corea por doquier se levantan sucesivamente las modernas viviendas y centros de las actividades culturales y estéticas para las masas y se dan trascendentales saltos en la construcción de un Estado socialista, poderoso y próspero.
En la actualidad el pueblo coreano, calificando el PTC como el “partido madre”, se lo confía y sigue exclusivamente y está dispuesto a compartir el mismo destino junto con él, lo cual no es casual.
Un partido como el PTC siempre es invencible, esta es la verdad comprobada por la historia.
El PTC es eternamente triunfante.