domingo, 10 de abril de 2011

ATCC critica ejercicios bélicos en Sur de Corea



Pyongyang, 8 de abril (ATCC) -- Antes y después de Chongmyong (5 de abril, fiesta folclórica de Corea), tomaron auge los ejercicios de guerra que se desarrollan en el Sur de Corea.

El cuerpo no. 8 del ejercito títere surcoreano desarrollo los días 4 y 5 un ejercicio militar de gran envergadura movilizando a todos sus efectivos desplegados a lo largo de la zona de Ryongdong, o sea, desde Kosong hasta Samchok de la provincia de Kangwon del Sur de Corea.


Las fuerzas aéreas títeres iniciaron el día 4 otro entrenamiento, que termina el dia 8, con el alegato de garantizar la coordinación con la aviación norteamericana en los preparativos de combate y las operaciones aéreas.


Resultan un crimen antiético tales acciones militares que persiguen solo la guerra y la confrontación sin tomar en cuenta la paz ni las costumbres tradicionales de la nación coreana.


En Corea existe desde la antigüedad la costumbre de visitar en el día de Chongmyong junto con los familiares, parientes y vecinos las tumbas de antepasados para arreglarlas y recordar a ellos.


A diferencia del jolgorio del Año Nuevo y el 15 de enero lunar, otra fiesta folclórica, ese día se caracteriza por la solemnidad y el respeto que guardan los hombres y mujeres de todas las edades en homenaje a sus antecesores.


Sin embargo, los títeres surcoreanos desataron ese día el pánico e inquietud librando en el cielo y la tierra frenéticos ejercicios bélicos.


 ¿Esto es el reflejo del "sentimiento popular" de que hablan tanto ellos?


Habría que recordar que el circulo militar surcoreano había llevado al fracaso el contacto de trabajo preparado difícilmente este año para las conversaciones Norte-Sur diciendo que "se debe tomar en consideración el sentimiento popular" durante las fiestas nacionales.


Pero, esta vez, cometieron abiertamente los ejercicios bélicos con motivo de Chongmyong, lo cual insinúa que el "sentimiento popular" no pasa de ser un pretexto para romper el dialogo entre ambas partes coreanas.


Los títeres surcoreanos fingen estar interesados en el dialogo y rehúsan realmente el dialogo N-S con el fin de callar la opinión publica interna y externa que demanda el cambio de su política conflictiva con la RPDC.


No se puede perdonar nunca tal proceder criminal de la camarilla militar surcoreana.