domingo, 10 de abril de 2011

ATCC comenta la prolongación de sanción anti-RPDC de Japón

Pyongyang, 8 de abril (ATCC) -- En la reunión de ministros efectuada el día 5, el gobierno japonés decidió por séptima vez prolongar un año mas el plazo de sanción que aplicaba independientemente contra la Republica Popular Democrática de Corea desde julio de 2006.

Esa medida tan ridícula, cínica y malvada la pueden tomar solo los tipejos extremadamente hostiles a la RPDC.


El gobierno japonés la ha justificado esta vez pretextando las actividades nucleares de la RPDC para fines pacíficos.


Resulta absurda esa acusación del gobierno japonés justamente cuando este pone inquieta a la sociedad internacional por no haber manejado debidamente la seguridad de centrales nucleares.


Japón no puede liberarse de la responsabilidad del macabro desastre nuclear impuesto a la humanidad a raíz de la explosión sucesiva de reactores de la planta nuclear de Fukushima y el subsiguiente escape de enormes radiaciones.


Para colmo, el gobierno japonés botó intencionalmente a las aguas marítimas inmensos residuos contaminados por la radiactividad sin ningún aviso previo, lo cual suscita las protestas y la condena de los pueblos vecinos por generar el peligro real para la vida de estos.


Por lo tanto, esta claro para todos que las sanciones deben aplicarse a Japón.


Sin embargo, Japón se dedica a dar prorroga a las medidas de sanción contra la RPDC en vez de pedir disculpas a la sociedad internacional y ocuparse de los asuntos de casa.


Esto comprueba que a que grado llega su afán de aislar y atropellar a la RPDC.


La polémica decisión del gobierno japonés demostró a todo el mundo la bajeza moral de los reaccionarios japoneses.


Las medidas, que debería tomar el gobierno japonés en estos días turbulentos, no son las de sanción anticoreana sino las encaminadas a la estabilización de la vida de victimas del terremoto y a la disminución de los daños de radioactividad.