jueves, 26 de junio de 2014

MINREX de RPDC denuncia acto provocativo de EE.UU.


    Pyongyang, 25 de junio (ACNC) -- El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Popular Democrática de Corea publicó el día 25 la siguiente declaración:
    Las cobardes maniobras de los enemigos tendentes a manchar la máxima dignidad de la RPDC pasan el límite y se cometen en la extremada etapa criminal.
    La sociedad internacional se consterna ante la realidad en que en Estados Unidos, caudillo del terrorismo internacional, se divulga abiertamente el anuncio previo de la película con el contenido de insultar y asesinar la Dirección Suprema de la RPDC.
    Tales imprudentes tentativas provocativas de EE.UU. que se atreve a atacar a la Dirección Suprema de la RPDC instigando a un empresario de película gangsteril, causan la vehemente indignación e ira del ejército y pueblo coreanos.
    El proceder de EE.UU. es el reflejo del temor por el radiante futuro de la RPDC guiada por el gran hombre sin igual y no pasa de ser esfuerzos agónicos de los enloquecidos por la ilusión vana.
    La proyección de la película que demuestra abiertamente el intento de dañar a nuestra Dirección Suprema es un intolerable acto terrorista y de guerra más abierta tendente a eliminar el pilar del alma de nuestro ejército y pueblo y derrocar el régimen de la RPDC.
    Son inimaginables al margen de la Dirección Suprema de la RPDC la digna y orgullosa vida del pueblo coreano, los grandes cambios que se registran en nuestro país y lo todo precioso del futuro maravilloso en que se harán realidad el sueño e ideal del pueblo.
    Es por eso que el ejército y pueblo coreanos consideran más valiosa que su vida a la Dirección Suprema.
    Los militares y civiles coreanos tienen la firme decisión y temperamento de aniquilar indiscriminadamente a quienes insultan o intentan calumniar aun en lo mínimo su Dirección Suprema
    Los criminales, que insultaron esta vez nuestra Dirección Suprema y cometieron los actos hostiles anti-RPDC, no podrán evadir el castigo severo en virtud de la ley, aunque estén en cualquier rincón de nuestro planeta.
    Si la administración estadounidense tolera y ampara la proyección de tal filme, se tomarán las contramedidas rotundas y despiadadas merecidas.