Pyongyang,
19 de abril (ACNC) -- Quedó publicada el día 19 en el diario Rodong Sinmun la
charla del Máximo Dirigente Kim Jong Un hecha el día 6 con los funcionarios
directivos del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea "Llevemos a
feliz término la causa revolucionaria del Juche enalteciendo al gran camarada
Kim Jong Il como eterno Secretario General de nuestro Partido".
Es
la demanda de principios enaltecer al gran General como eterno Secretario
General del Partido para impulsar
victoriosamente nuestra causa revolucionaria manteniendo invariablemente su
idea y líneas dijo y añadió:
Esto
no es nada simbólico. Quiere decir que la construcción y las actividades
partidistas se realizarán según la idea y voluntad del General, teniéndolo
siempre en la secretaría general del Partido.
La
idea y las líneas del gran General constituyen eternas guías directrices del
PTC y la revolución coreana y sirven de la bandera invencible cuya justeza y
vitalidad fueron comprobadas en la práctica revolucionaria. Al margen de ellas,
no se puede pensar en el avance victorioso y el cumplimiento de nuestra causa
revolucionaria.
Sólo
cuando tengamos al General como eterno Secretario General de nuestro
Partido, podemos impulsar vigorosamente
también en el futuro al igual que en el pasado la revolución y la construcción
y llevar a feliz término la causa revolucionaria del Juche.
La
idea directriz del PTC es el gran Kimilsunismo-Kimjongilismo. El PTC es la
gloriosa organización kimilsunista-kimjongilista que toma por su idea directriz
el Kimilsunismo-Kimjongilismo y lucha por ponerlo en práctica.
La
transformación de toda la sociedad según el Kimilsunismo-Kimjongilismo es el
máximo programa de nuestro Partido. Esta labor es la continuación
revolucionaria de la transformación de toda la sociedad según el Kimilsunismo y
su desarrollo en la nueva y superior etapa.
Al
igual que venimos luchando tenazmente bajo la sabia guía del gran General
presentando como máximo programa del Partido la transformación de toda la
sociedad según el Kimilsunismo, debemos luchar intensamente en lo adelante por
transformar toda la sociedad según el Kimilsunismo-Kimjongilismo.
Por
muy enormes que fueran nuestras tareas de la revolución, es definitiva nuestra
victoria porque contamos con extraordinarios líderes, eterno Sol del Juche, el
invencible PTC, el pueblo infinitamente fiel al Partido y la Líder , y el poderoso
ejército revolucionario del monte Paektu.
Debemos
glorificar para siempre la vida revolucionaria del General y sus inmortales
hazañas revolucionarias enalteciéndolo como eterno líder del PTC y el pueblo
coreano.
Él
fue gran Dirigente, patriota sin igual y padre generoso del pueblo que dedicó
todo lo suyo por la prosperidad de la patria y la felicidad del pueblo dando
pruebas de su fidelidad absoluta al gran Líder y su cálido amor por la patria y
el pueblo. Su vida fue la más brillante del Gran Hombre sin par que realizó
imperecederas proezas ante el Partido, la revolución, la patria y el pueblo
acatando el noble propósito del gran Líder.
Debemos
cumplir con conciencia inmaculada y obligación moral todas las labores para
enaltecer eternamente al gran General y realizar la causa de eternidad del
líder.
Desarrollar
nuestro Partido como eterno Partido del camarada Kim Il Sung y Kim Jong Il
significa mantener con firmeza el Kimilsunismo-Kimjongilismo como la idea
directriz del Partido y realizar la construcción y las actividades del Partido
de acuerdo con la idea y el propósito de estos grandes hombres.
Lo
más importante para este fin es establecer con más firmeza el sistema de
dirección única del Partido.
Todos
los militantes del Partido, los oficiales y soldados del EPC y los habitantes
deben apoyar con fe y conciencia la idea y la dirección del Partido, unirse
compactamente en lo ideo-volitivo y lo moral en torno al Comité Central del
Partido y compartir siempre la vida o muerte con nuestro Partido tanto en los
días normales como en los arduos.
Tenemos
que fortalecer por todos los medios la unidad monolítica del Partido y las
filas de la revolución y defenderla firmemente.
La
unidad monolítica es la más valiosa herencia revolucionaria que nos dejó el
General y lo más importante en la revolución coreana. Nuestra unidad monolítica
entre el líder, el Partido y las masas a base de la gran idea, cálido amor y
afecto es el tesoro más grande que no se cambiaría ni con montones de oro.
Debemos
respetar mucho al pueblo y defender consecuentemente sus intereses
considerándolos como absolutos y atenderlo con el afecto de verdadera madre.
En
pleno acato al noble propósito del gran Líder y el gran General, quienes
consideraron como la máxima de vida el ideario Iminwichon (considerar al pueblo
como el cielo), se debe respetar mucho al pueblo y realizar todos los trabajos
dando prioridad a su demanda e intereses. Hace falta hacer reinar en todo el
país las nobles y bellas costumbres de ayuda recíproca para convertir la
sociedad en una gran familia armoniosa y unida monolíticamente.
La
conducta heroica del ex minero de la
Mina de Kumgol, Pak Thae Son, y ex granjero de la Granja Cooperativa
de Ohyon del distrito de Yon-an, Ri Chang Son, quienes ofrendaron sin
vacilación sus valiosas vidas para el colectivo y los camaradas, es la virtud
visible sólo en los seres humanos de nuestra época formados por el gran Líder y
el gran General y el ejemplo que debemos aprender todos nosotros.
El
Songun (priorización militar) implica nuestra independencia, dignidad y vida.
Si
es débil en las fuerzas armadas, no se puede defender su soberanía ni derecho a
la existencia y se convierte finalmente en el objeto de ultrajes y la víctima
de los imperialistas, esto es la realidad irrefutable de hoy y por eso, debemos
impulsar constantemente los quehaceres encaminados a incrementar el poderío
militar.
El
poderío del Songun es precisamente el del EPC y consolidarlo es la cuestión
fundamental para fortalecer las fuerzas militares.
Como
grueso de la revolución, el EPC debe ser siempre el abanderado y brigada de
choque tanto en la defensa de la patria como en la materialización del proyecto
del Partido en materia de la construcción de un Estado próspero y el precursor
en la creación y divulgación de la cultura del Songun en el nuevo siglo.
Es
preciso establecer estrictamente en toda la sociedad el clima de dar
importancia a los asuntos militares y fortalecer el sistema de defensa de todo
el pueblo y todo el Estado, de manera tal que todo el país se haga una
fortaleza inexpugnable. Tenemos que producir un viraje decisivo en el
mejoramiento de los niveles de la vida del pueblo y en la construcción de la
potencia económica. Hay que beneficiarse de las preciosas bases preparadas por
el General para que sea más feliz en el mundo el pueblo coreano, que confía
siempre y apoya únicamente al Partido. Esto fue el anhelo del gran General, y
es la firme decisión y voluntad de nuestro Partido.
Es
preciso revitalizar cuanto antes los dominios avanzados de la economía nacional
y las industrias básicas, mediante una tenaz ofensiva y en el fragor de la
llamarada de Hamnam, con el fin de consolidar el fundamento de desarrollo
económico y registrar un auge productivo en todos los sectores de la economía
nacional.
Para
revitalizaar la economía nacional, estabilizar y mejorar la vida del pueblo,
resulta imperioso dar prioridad a los dominios eléctrico, carbonífero,
metalúrgico y ferroviario.
Debemos
convertir nuestro país en una potencia económica basada en la intelectualidad
avivando las llamas de la revolución industrial del nuevo siglo. Debemos luchar
con meta e ideal ambiciosos y superar el nivel mundial en todos los planos
según el propósito del General de poner los pies en la tierra patria con la mirada
hacia el mundo.
Tenemos
que desplegar con dinamismo la campaña de conquista de las tecnologías
sofisticadas con el espíritu de exploración y modo de creación de los empleados
de Ryonha, quienes alcanzaron un desarrollo vertiginoso en la producción de las
máquinas herramientas CNC, para alcanzar el nivel mundial en la calidad del
conjunto de equipos técnicos del país y perfeccionar la estructura de la
economía en lo conveniente a la época de la economía basada en intelectualidad.
Debemos
aportar la fuerza a la administración territorial para transformar la patria
como el paraíso del pueblo más hermoso y confortable a vivir.
Es
preciso concentrar al Consejo de Ministros todos los problemas que se presentan
en las labores económicas y establecer estrictamente la disciplina y el orden
de resolverlas según el mando unificado del Consejo de Ministros.
El
Consejo de Ministros, comandancia económica responsable por los asuntos
económicos del país, debe establecer con vistas al futuro y de modo científico
y realista la meta y la estrategia de desarrollo económico y realizar con
iniciativa y resueltamente el control, la dirección y la administración de
todas las cuestiones económicas.
Todos
los sectores y unidades deben resolver los problemas vinculados con la economía
en coordinación con el Consejo de Ministros e implementar sin falta las
resoluciones e indicaciones del Consejo de Ministros orientadas al cumplimiento
de las políticas económicas del Partido.
Al
registrar sin parar el cambio revolucionario en todos los sectores de la
construcción cultural como educación, salud pública, literatura y arte y
deportes, debemos dignificar nuestro país como Estado socialista avanzado y
culto.
Hacen
falta aumentar la inversión estatal en el sector docente, modernizar las
instituciones y equipos de educación, elevar decisivamente el nivel de
educación general de enseñanza media y mejorar la calidad de educación superior
para formar mucho más talentosos hombres científico-técnicos de talla mundial,
encargados de la construcción de Estado próspero socialista.
Hay
que poner de pleno manifiesto la superioridad del sistema socialista de salud
pública de nuestro país, crear y divulgar muchos más obras maestras que
representen la época, y levantar la oleada deportiva en todo el país mediante
la masificación del deporte. De esta manera, debemos lograr que nuestro pueblo
sea creador y gozador de la noble cultura socialista en algo grado de
civilización y reine en toda la sociedad el ambiente jubiloso y optimista.
Para
traer un viraje decisivo en la construcción de un Estado próspero socialista
según el propósito y el anhelo del Dirigente Kim Jong Il, debemos elevar, ante
todo, la función y el papel de las organizaciones partidistas y los
funcionarios deben cumplir su responsabilidad y el papel de miembros de mando
de la revolución.
Los
funcionarios deben prepararse como competentes y sinceros cuadros como Kim
Chaek quien cumplió con excelencia cualquier difícil tarea en apoyo al
Presidente Kim Il Sung.
Hoy
les toca a los funcionarios ponerse al frente de las filas y ellos deben ser
soldados de avanzada que abran paso en el camino nevado intransitado y
locomotoras que conduzcan a las filas al pie de los talleres de trabajo.
No
existe el pueblo para el funcionario sino viceversa.
Los
funcionarios deben compartir la vida o la muerte y la alegría o la pena con el
pueblo comiendo lo mismo que come éste al aprender la concepción del pueblo del
gran Líder y el General y esforzarse tanto por hacer favores al pueblo.
Debemos
realizar sin falta la histórica causa de reunificación de la patria
materializando cabalmente el propósito de toda la vida y el legado del gran
Líder y el General y desarrollar activamente las actividades exteriores en
pleno acato a la estrategia y el propósito del Líder y el General en materia de
la estrategia y proyecto de actividades exteriores para contribuir al
cumplimiento de la causa de la independencia en el mundo entero.
Teniendo
presente que el gran Líder y el General nos estimulan viviendo siempre en
nosotros, debemos hacer ingentes esfuerzos por llevar a efecto el propósito y
el anhelo del Líder y el General y glorificar la nueva centuria de la
revolución jucheana como anales llenos de victorias y glorias.