En imagen pequeña parte de las delegaciones que participaron en el centenario del Presidente
KIM IL SUNG, en el frontis de su casa natal en Makiondae
El compañero KIM JONG UN publica la presente tesis destacando en ella la gran labor realizada por el Gran Líder Inmortal y el querido Dirigente Kim Jong Il, quienes han dirigido los destinos de la Corea socialista.
Es en esta fecha del centenario del Día del Sol, en la que los amigos de Corea y los seguidores del presidente Kim Il sung, se reunieron en Pyonyang para rendir su mayor homenaje al Gran Líder inmortal Sol de la Nación Coreana, quien por sus grandes dotes de líder político y gran estratega militar logra la derrota de dos imperialismos, por lo que este fecha se convirtió en un a fecha de celebración de toda la humanidad.
Es por ello que saludamos al compañero Kim Jong Un y hacemos extensivos a todos los hermanos coreanos, que en este centenario jubiloso lo celebran como la mayor fiesta nacional.
Por ello compartimos con ustedes queridos amigos esta tesis y esperamos su apoyo en su difusión como siempre.
Atte.
Yuri Castro Romero
Pyongyang, 12 de
junio (ACNC) -- En ocasión del centenario del natalicio del Presidente Kim Il Sung, el Máximo Dirigente Kim Jong Un hizo pública el 20 de abril la tesis "El gran camarada Kim Il Sung es el líder eterno de nuestro partido y pueblo".
En su tesis, Kim Jong Un subrayó que los
recientes festejos del centenario del natalicio del Presidente fueron la
expresión de profunda veneración y noble obligación moral del pueblo coreano
hacia él y un gran festival político en que toda la humanidad elogió la
historia centenaria de la Corea
del Juche.
Abajo sigue el texto detallado de la tesis:
El pueblo coreano tuvo la gloria y orgullo más grandes y aseguró
la felicidad de todas las generaciones venideras, al enaltecer como eterno
líder al camarada Kim Il Sung, respetado por
toda la nación y el mundo entero.
El camarada Kim Il Sung es el más
destacado líder y Gran Hombre sin par del siglo XX.
No hubo otro líder, patriota y revolucionario tan extraordinario
como él que coronó el siglo XX como el de victoria de la causa de independencia
antiimperialista y la socialista bajo el apoyo y la confianza absoluta del
pueblo que ganaba como reconocimiento a su idea y dirección extraordinarias y
nobles virtudes durante largo tiempo desde a la edad tierna de diez y tantos
años hasta a la edad avanzada de 80 años.
Toda su vida fue la noble de líder popular que tomó como máxima
de vida el ideario Iminwichon (el pueblo es cielo) y lo hizo realidad
materializándolo en sus pensamientos y dirección.
Cuando el camarada Kim
Il Sung fue enaltecido como líder, comenzó la nueva época de la
historia, la del Juche, en que las masas populares, que antes estuvieron al
margen de la historia, forjan su destino por cuenta propia poniéndose en el
centro de la época y la historia.
Constituye un evento histórico digno de registrarse en letras
mayúsculas en la historia de pensamientos de la humanidad y de lucha revolucionaria
de las masas populares el hecho de que él haya levantado por primera vez la
bandera de independencia y la haya definido como principio y modo de la
revolución.
Desarrolló sin cesar en el principio de independencia también
las relaciones con los partidos y Estados de otros países.
Él fue invencible general de acero y genio militar que allanó el
camino de la revolución coreana y la condujo a la victoria con las fuerzas
armadas.
Por haber derrotado con ventajas ideo-políticas y
estratégico-tácticas a los enemigos imperialistas superiores en lo número y
técnico en la pasada Guerra Revolucionaria Antijaponesa y la Guerra de Liberación de la Patria , todo el mundo
veneraba muchísimo y confiaba en él llamándolo como general de acero,
extraordinario estratega militar y símbolo de victoria en la lucha
antiimperialista.
Ese gran hombre no tenía parangón tanto en las cualidades de
revolucionario como en las virtudes humanas.
Durante largo tiempo desde el inicio de sus actividades
revolucionarias, pensó únicamente en la revolución y dedicó todo lo suyo por el
triunfo de ella resistiendo todas las tristezas y amarguras que pueda sufrir el
hombre.
Durante su larga carrera de revolucionario, se responsabilizaba
y protegía hasta el final el destino y el futuro de todos que se hicieron sus
camaradas.
Y depositaba gran confianza y dispensaba inmensas benevolencias
a decenas de miles de soldados revolucionarios.
También trataba y atendía cordialmente al pueblo dando pruebas
de su humanidad, modestia y franqueza.
Abrazaba en su regazo y depositaba confianza en cualesquiera que
amaran el país y la nación presentándolos como compañeros eternos en la causa
por la patria y la nación.
El Presidente Kim Il Sung, que tenía
profunda y amplia humanidad, trabó estrecha amistad con los líderes del partido
y el Estado, las renombradas personalidades del círculo político, el social y
el académico de varios países del mundo que aspiraban a la independencia.
Nuestro Presidente fue el que tenía más camaradas y amigos en
este mundo.
Él es eterno líder del Partido del Trabajo de Corea y el pueblo
coreano y el Sol del Juche que sentó la eterna piedra angular para el avance
victorioso y el cumplimiento de la causa revolucionaria del Juche.
El camarada Kim Il Sung abrió la nueva era
de la revolución jucheana al concebir la gran idea Juche y en virtud de ella,
condujo a la victoria fulminante la revolución social de varias etapas y
realizó inmortales hazañas en todas las ramas de la revolución y la
construcción.
Gracias al PTC, partido revolucionario del tipo Juche, al
verdadero poder del pueblo de la República Popular Democrática de Corea y al
invencible Ejército Popular de Corea, fundados y desarrollados por el
Presidente, y al pueblo coreano formado por él como el fuerte en idea y convicción,
la revolución coreana avanza hoy, al igual que en el siglo pasado, creando
milagros de la historia en todos los sectores de la construcción socialista
superando las dificultades y pruebas inimaginables.
La unidad monolítica de todo el partido, todo el ejército y todo
el pueblo en torno al líder, garantiza hoy día la estabilidad política y la
solidez del Estado y la sociedad de Corea y sirve de potente motor en la
defensa de la patria socialista, la revolución y la construcción.
El camarada Kim Il Sung resolvió
perfectamente el problema de sucesión de la causa revolucionaria preparando así
la garantía de continuar victoriosamente de siglo en siglo y generación tras
generación la causa revolucionaria del Juche.
Tomando la reunificación de la patria como suprema causa
patriótica de la nación, trabajó con todo su empeño por el fortalecimiento y el
desarrollo del movimiento por la reintegración territorial y acumuló así
preciosas proezas en las labores para realizar ese anhelo de la nación.
Levantando en alto la bandera de independencia y la de justicia
internacional, trabajó activamente para frustrar las acciones dominacionistas
de los reaccionarios imperialistas, intensificar y desarrollar el movimiento
socialista mundial, lograr la victoria de la causa de independencia
antiimperialista, establecer independientes y equitativas relaciones
internacionales y alcanzar la paz y la seguridad del mundo.
El Presidente Kim Il Sung vive siempre como
Sol del Juche y la primera centuria de la Corea del Juche brilla con su nombre gracias al
Dirigente Kim Jong Il quien defendió con
firmeza la ideología y la causa del primero y condujo sabiamente la lucha por
cumplirlas.
Kim
Jong Il fue el camarada revolucionario y compañero de armas más íntimo
y más fiel al Presidente.
Él enalteció al Presidente tomando como misión de toda su vida
defender y glorificar la idea y la causa del segundo.
Al definir la idea revolucionaria del Presidente como el
Kimilsungismo y presentar la transformación de toda la sociedad según ese
pensamiento como máximo programa del Partido del Trabajo de Corea y la
revolución coreana, el Dirigente registró un viraje revolucionario en el
cumplimiento de la causa revolucionaria del Juche.
El Dirigente hizo enaltecer al Presidente como eterno líder del
PTC y el pueblo y eterno Presidente de la República Popular
Democrática de Corea y llamó a todo el partido, todo el ejército y todo el
pueblo a materializar el legado del Presidente tomándolo por el programa del
Partido.
Él defendió la dignidad y los supremos intereses de la patria y
la nación e hizo brillar la patria socialista del Juche como una potencia
socialista invicta basándose en las poderosas fuerzas armadas y sosteniendo en
alto la bandera del Songun.
En pleno acato al legado del Presidente, el Dirigente abrió con
su enérgica guía la era de reunificación del 15 de Junio y una nueva coyuntura
en el desarrollo de las relaciones exteriores.
La historia de la nación de Kim
Il Sung y la Corea
de Kim Jong Il es la trayectoria gloriosa en que la revolución coreana dio su
primer paso en el Paektu y vino triunfando hasta la fecha, y la senda de
victoria eterna y prosperidad de la patria que debemos seguir emprendiendo por
la victoria final.
Le corresponden al partido y al pueblo el deber revolucionario y
la noble obligación moral de enaltecer siempre al camarada Kim Il Sung y al camarada Kim Jong Il y continuar
generación tras generación la causa revolucionaria del Juche, legada por ellos,
hasta su feliz término.
Deben defender y glorificar la idea y las hazañas del Presidente
y el Dirigente guardando en lo profundo del corazón la invariable fe de que el
camarada Kim Il Sung y el camarada Kim Jong Il viven siempre en nosotros.
Hay que impulsar la revolución y la construcción según los
requerimientos de Kimilsungismo-Kimjongilismo tomando esta doctrina como única
y eterna idea directiva de la revolución.
Es preciso continuar íntegramente la idea y las hazañas del
Presidente y el Dirigente en la construcción del partido, el Estado y las
fuerzas armadas revolucionarias y cumplir esta tarea a la manera de ellos.
En todas las ramas y unidades, deben llevar a la realidad lo que
se proponían y deseaban en su vida el Presidente y el Dirigente, al conservar y
transmitir bien sus huellas de dirección registradas en sus centros de trabajo
y cumplir cabalmente sus legados.
En continuación de la idea y hazañas de ellos en materia de
construcción de la autóctona cultura, hay que hacer más ventajosa y vital la
cultura socialista al estilo nuestro.
Según el noble propósito patriótico y legados del Presidente y
el Dirigente, se debe cumplir sin falta la histórica causa de reunificación de
la patria, ampliar y desarrollar las relaciones exteriores del país bajo el
ideal de independencia, paz y amistad y contribuir activamente a la causa de
verificación de la independencia en el mundo entero.
El PTC, el ejército y el pueblo de Corea llevarán a feliz
término la causa revolucionaria del Juche continuando con fidelidad la idea y
la causa del camarada Kim Il Sung y el camarada Kim Jong Il bajo la bandera de Kimilsungismo - Kimjongilismo.