lunes, 23 de enero de 2012

Los crímenes del "poder" de Lee Myung Bak

Pyongyang, 20 de enero (ACNC) -- El Instituto de Desarme y Paz del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Republica Popular Democrática de Corea publico el día 19 un informe de estudio que revela los crímenes del "poder" de Lee Myung Bak que ha perturbado gravemente la paz y la seguridad de la región del Nordeste Asiático.
Durante 4 años de su mandato, el "poder" de Lee llevo las relaciones intercoreanas a la peor coyuntura, puso en serio peligro la paz y la seguridad del Nordeste Asiático y generó grandes obstáculos para el proceso de desnuclearización, comienza el texto y continúa:
El "poder" de Lee sirve de mecha de guerra en la Península Coreana.
Enloquecido por su ambición de la "reunificación a modo de absorción", Lee se dedico a la campaña conflictiva con el Norte (de Corea) planteando hasta el "impuesto de reunificación" y empeoró la situación de la Península Coreana a tal punto que el Norte y el Sur intercambiaron los obuses de artillería por primera vez después de la guerra coreana del 25 de junio de 1950.
Ahora, cientos de miles de efectivos surcoreanos desplegados en la parte sur de la línea de demarcación militar están pasando prácticamente al estado de guerra como el de "ataque preventivo, el de punto de origen".
El "poder" de Lee es el perturbador de la paz y la seguridad de la región del Nordeste Asiático.
Esta región es la mas delicada donde las potencias militares y los países poseedores de armas nucleares del mundo están colindados o se enfrentan militarmente.
En marzo de 2010, ocurrió en el Sur de Corea el hundimiento de la corbeta "Cheonan".
Como si hubiera esperado ese caso, el "poder" de Lee lo relaciono injustamente con la RPDC.
Aprovechándolo, EE.UU. dio una importante coyuntura estratégica capaz de impedir en lo militar China a su favor al mandar su flotilla de portaaviones al Mar Oeste de Corea en función de su compromiso a la defensa del Sur de Corea.
Mientras que el "poder" de Lee rechazaba hasta el final la demanda del grupo de inspección del Comité de Defensa Nacional de la RPDC sobre el esclarecimiento imparcial de lo ocurrido realmente en ese incidente, EE.UU. termino en unos meses bajo el cartel de "contramedidas" y ejercicios militares conjuntos la preparación de sus fuerzas militares distribuidas en las zonas avanzadas del Nordeste Asiático para cumplir las misiones de cercar, disuadir y atacar con movilidad a sus rivales.
Como resultado, se crea entre China y EE.UU. el peligroso estado de confrontación militar y se agudizan las contradicciones militares entre Rusia y EE.UU. en torno al establecimiento del sistema antimisiles. Mientras tanto, en Japón toma auge el lanzamiento de satélites artificiales de espionaje y se descubrió una reserva de plutonio no declarada, lo cual causa seria preocupación del mundo.
Se realizan con más frecuencia los ejercicios miliares conjuntos EE.UU.-Sur de Corea y esta tomando el perfil la alianza militar tripartita que incluye además a Japón. Este hecho esta centrando la mirada de desconfianza de los países vecinos.
Por otra parte, muchos expertos militares nacionales y extranjeros reconocen unánimemente que la construcción de una base naval de gran dimensión en la isla Jeju, muy lejana de la Línea de Demarcación Militar, no es una medida frente a la RPDC sino la que conviene a la estrategia de EE.UU. de restringir el teatro operacional de las fuerzas navales y aéreas de China y Rusia.
En fin de cuentas, el "poder" de Lee es el lacayo de guerra que actúa como guía y puente de EE.UU. que persigue el "retorno a Asia" para realizar su antaño sueño de tomar la hegemonía mundial.
El "poder" de Lee es el que estropea la desnuclearización de la Península Coreana.
La desnuclearización de esta región es un eslabón de la del mundo entero y constituye la aspiración unánime del pueblo coreano y sus vecinos y la humanidad pacifista del mundo.
Las autoridades surcoreanas son las únicas que no se suman a los esfuerzos de los demás participantes en las conversaciones a 6 bandas, inclusive la RPDC, por reanudar esta cita.
A decir la verdad, este dialogo es un espacio incomodo para el "poder" de Lee porque no conviene a su "política sobre el Norte". Si se reanuda la cita, se impulsara de modo automático la implementación de la Declaración Conjunta del 19 de Septiembre que prevé normalizar las relaciones entre todos los países participantes y asegurar a la RPDC la recompensación económica y otras cooperaciones para solucionar el problema nuclear.
Tal evolución de la situación puede frustrar el designio de las autoridades surcoreanas que suplicaron a sus amos mantener la "estrategia de espera" y la política de "paciencia estratégica", deseando que la RPDC se desplome o se rinda por sus dificultades económicas.
Si se pierde para siempre la oportunidad de reanudar las conversaciones a 6 bandas, la responsabilidad recaerá sobre el "poder" de Lee que se dedica a las artimañas por sus intereses faltos de visión y egoístas.
Como sucedió en el caso de neoconservadores de EE.UU., los elementos de confrontación anti-RPDC surcoreanos, insensibles a la corriente de la época y cortos de visión, tuvieron que retirarse ya en medio de condenación de todo el mundo. Así será el destino del "poder" de Lee Myung Bak.
Todos los países de la región interesados en la paz, la estabilidad y la desnuclearización deberán tomar buenas medidas para minimizar las consecuencias de lo que ha cometido el "poder" de Lee.