viernes, 29 de marzo de 2013

El camino que Corea Sigue


Estimados amigos adjunto el presente artículo para su conocimiento y entendimiento de la vida en la península coreana y en lo que radica su fuerza y su unidad.

la RPDC se mantendrá firme aún en los tiempos más difíciles (que ya los ha tenido) defenderá no solo su soberanía sino también su sistema e independencia.

Esta es la mayor fuerza del pueblo coreano su unidad monolítica entre el líder  el partido y las masas populares que son la verdadera razón de ser del estado.

Agradecemos su apoyo y difusión.
Atte. 

Yuri Castro Romero

El camino que Corea sigue

Después del fallecimiento del Dirigente Kim Jong Il el mundo se interesó mucho en conocer el camino que la RPDC escogería. En este momento dicen que continuaría hasta el fin el camino de la independencia, el de Songun y el socialista, vías abiertas por el Presidente Kim Il Sung,
fundador de la Corea socialista y mantenidas por el Dirigente Kim Jong Il.
Corea nunca abandonará su actitud de la independencia.
Tras sus repetidas visitas a ese país, el expresidente estadounidense Carter expresó que Corea del Norte es una sociedad especial que considera como su fe la filosofía que defiende la independencia.
La idea Juche concebida por Kim Il Sung y enriquecida y desarrollada por Kim Jong Il se conoce en la comunidad internacional por “filosofía de la independencia”.
La historia contemporánea de Corea es la de la lucha por la independencia conducida por la idea Juche. Ese país ha abogado invariablemente por la soberanía política, económica y militar y enarbolado el lema de independencia, amistad y paz para su política exterior.
La posición y actitud que el gobierno de la RPDC mantiene frente a Estados Unidos en últimos años hacen apreciar la importancia que ese país concede a la independencia.
En enero de 2003 su gobierno declaró su retirada inmediata y total del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares, medida que tenía suspendida temporalmente desde hace diez años. Realizó su primera prueba nuclear en octubre de 2006 y la segunda en mayo de 2009 como parte de su justo proyecto para defender sus supremos intereses de la constante amenaza norteamericana con armas nucleares.

El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó “sanciones” contra la RPDC y ésta declaró nula su decisión considerándola como producto de la actitud servil ante la presión norteamericana. De esa manera defendió la soberanía nacional y abrió una abertura en el injusto orden internacional que permitía la arbitrariedad del hegemonismo y se pronunció por la independencia en las relaciones internacionales.
A este respecto, un profesor estadounidense afirmó que ningún país supera a Norcorea en pasión con que se aspira a la independencia ni en abnegación con que se consagra a la lucha por aplicarla.
El pueblo coreano está firmemente convencido de que la independencia es la verdad y ésta siempre vence. La revista cubana Bohemia comentó en un artículo que el pueblo coreano avanzará sin descanso enarbolando la bandera de la independencia.
Corea continuará su camino de Songun (priorizar los asuntos militares).
La revolución coreana se inició con las armas y ha logrado avances con el apoyo de las fuerzas armadas.
Sus revolucionarios lograron la victoria en la Lucha Armada Antijaponesa de 15 años para liberar su país de la ocupación militar (1905-1945) del imperialismo japonés. La RPDC derrotó a Estados Unidos autodenominado como superpotencia mundial en la guerra (1950-1953) desatada
a dos años de su fundación y defendió la soberanía y dignidad nacional. Esas dos guerras llenan un capítulo muy importante de la historia contemporánea de Corea. Después del cese al fuego, su pueblo dedicó enormes esfuerzos al fortalecimiento de las potencialidades militares planteándose el desarrollo simultáneo de la economía y la defensa nacional para contrarrestar la permanente amenaza militar norteamericana.
Se atuvo más firmemente a su lema de Songun enfrentando a muchísimas  ificultades sin precedentes debido a la ofensiva antisocialista de las fuerzas aliadas imperialistas que se había exacerbado tras la caída del socialismo en varios países a fines del siglo pasado. Kim Jong Il multiplicó la capacidad militar del país considerando la política de Songun como forma principal de política socialista. El Ejército Popular de Corea se ha convertido en una fuerza invencible, más fuerte en ideología y fe que cualquier ejército del mundo y preparada para las operaciones de ataque y defensa. Ese país asiático ya cuenta con medios de disuasión capaces de rechazar cualquier agresión y provocación de guerra. Además de las fuerzas armadas regulares, las de defensa civil se han reforzado y el armamento de todo el pueblo y la fortificación de todo el país han alcanzado altos niveles.
La voluntad de Corea de no apartarse ni un centímetro del camino de Songun se confirmó con la visita de inspección del Comandante Supremo Kim Jong Un a la División Guardia de Tanques 105 “Seúl” Ryu Kyong Su ocurrida el primer día del año. La agencia AP y otros medios de prensa dedicaron su espacio a esta noticia dando un mensaje expresivo de que el nuevo líder coreano llevaría adelante la política de Songun que Kim Jong Il había aplicado.
La RPDC seguirá su ruta del socialismo.
Cuando con el derrumbe del socialismo y la recuperación del capitalismo en algunos países, Estados Unidos y otras fuerzas imperialistas pregonaban ruidosamente el “fin del socialismo”, dicho país continuó imperturbable por su camino enarbolando la bandera del socialismo, ideal de la humanidad. Muchos admiran la gran vitalidad del socialismo coreano y no escatiman elogios para Corea.

La RPDC es un Estado socialista centrado en las masas populares donde todas las cosas están al servicio del pueblo que desempeña el papel protagónico en todas las actividades. Los obreros, campesinos, intelectuales y otros sectores populares llevan una vida digna siendo dueños del Estado y la sociedad. Todos sin excepción disfrutan plenamente de los derechos como seres humanos, entre ellos, la libertad y derechos políticos, los de acceso al trabajo y al descanso. Libres de todos los impuestos, son beneficiados con los servicios gratuitos de educación y atención médica y gozan de una vida culta como creadores y usufructuarios de obras artístico-literarias. La sociedad entera se ha convertido en una gran familia armoniosa donde sus miembros se ayudan y solidarizan entre sí bajo la consigna de “¡Uno para todos y todos para uno!”. Billy Graham, líder religioso norteamericano expresó que Dios no tendrá nada que hacer en Corea.
Kim Il Sung y Kim Jong Il son quienes construyeron este país del pueblo, “paraíso” del pueblo. No hay duda alguna de que el pueblo coreano continuará su invariable camino de la independencia, de Songun y del socialismo siguiendo a su máximo Dirigente Kim Jong Un que es idéntico a sus antecedentes líderes Kim Il Sung y Kim Jong Il en ideas, arte de mando y cualidades.