martes, 29 de noviembre de 2011

Defensor del socialismo, Kim Jong Il Comandante Supremo del Ejército Popular de Corea

Hace 20 años, el día 24 de diciembre de 1991, el Dirigente Kim Jong Il fue nombrado como Comandante Supremo del Ejército Popular de Corea(EPC).
El tiempo transcurrido merece ser registrado en su brillante historia.
Kim Jong Il llevó a la cúspide la capacidad defensiva del país.
Nombrado como Comandante Supremo del EPC cuando el socialismo fue desplomado en la desaparecida Unión Soviética y varios otros países y las fuerzas aliadas imperialistas encabezadas por Estados Unidos, autodenominado “ganador de la guerra fría”, practicaban la coacción y arbitrariedad, tras de la guerra Pérsica, envaneciendo de su “potencialidad,”, Kim Jong Il fortaleció la capacidad defensiva del país en todos sus aspectos.
Presentó un original principio Songun de que el ejército garantiza la existencia del Partido, Estado y pueblo y prestó primordial atención al fortalecimiento del Ejército Popular, componente principal de la fuerza defensiva del país.
Realizó ininterrumpida visita de inspección a las unidades militares, preparando al EPC como ejército fuerte en la ideología y confianza, plenamente dispuesto a consagrar sin vacilación alguna la vida para defender a su líder, su régimen y su pueblo y como el invencible, dotado de originales métodos de combate y tecnología militar y provisto de potentes medios de ataque y de defensa.
También se interesó profundamente por el aumento de la combatividad de la Milicia Roja Obrero-Campesina y otras fuerzas armadas civiles y logró que todo el país fuera como una inexpugnable fortaleza.
Presentó una línea de la construcción económica, la de fomentar primero la industria de defensa nacional e hizo modernizar la industria de defensa nacional con la fuerza, tecnología y recursos autóctonos, en virtud de lo cual hoy Corea puede producir cuanto quiere cualquier armamento de ultimo tipo para la guerra moderna, y tiene incluso la potente capacidad de disuasión nuclear.
Kim Jong Il defendió con éxito el socialismo.
Cuando él ocupaba el cargo del Comandante Supremo los imperialistas y sus voceros, lanzando gritos de alegría ante sucesivo derrumbe del socialismo en varios países, vociferaron que este istmo era errado en su ideal.
Muchas personas del mundo que aspiraban al socialismo o simpatizaban con este, se empezaron a desesperar y titubear.
Kim Jong Il tomó la delante de la batalla ideológica para defender el socialismo.
Publicó varias obras, entre ellas Lecciones históricas de la construcción socialista y la línea general de nuestro Partido(enero de 1992), la difamación del socialismo no será tolerada (marzo de 1993) y el socialismo es ciencia (noviembre de 1994), en las que aclaró la legitimidad de la construcción de la sociedad socialista y su indispensabilidad histórica y las vías fundamentales para llevarla a la victoria, asentando el socialismo sobre un nuevo fundamento científico.
Orientó al pueblo coreano que ganara el combate a muerte contra las fuerzas aliadas imperialistas que intentaban estrangular el socialismo.
En marzo de 1993 cuando acaeció la crisis nuclear en la Península Coreana que ponía en tensión al mundo, Pyongyang proclamó en estado de preguerra y la retirada del tratado de la No Proliferación de las Armas Nucleares, una declaración de bomba.
Kim Jong Il enalteció al ejército como principal ejecutor de la causa socialista y logró que todos los civiles aprendieran del espíritu revolucionario de los militares, de manera que todos juntos se alzaran decididamente en la lucha por defender el socialismo.
Realizó continuamente visita de orientación a lo largo y ancho del país, dando origen a anécdotas como las leyendas sobre su amor y confianza cifrados en las personas, lo cual consolidó más la unidad monolítica de la sociedad coreana y el terreno político del socialismo.
Corea mantuvo firmemente la idea y el principio socialista y practicó constantemente las políticas de carácter socialista como la ensenanza obligatoria y la asistencia médica gratuitas aun cuando pasaba pésimas dificultades.
Kim Jong Il abrió una nueva era de la construcción de un Estado socialista, poderoso y próspero.
En agosto de 1998 Corea lanzó el satélite artificial de la Tierra Kwangmyongsong-1, producto nacional en ciento por ciento. Enseguida se propuso el magno proyecto de la construcción de una gran potencia socialista próspera, lo cual asombró a la comunidad internacional que consideraba como un milagro el hecho de que Corea había mantenido su existencia frente a las extremadas maquinaciones de aislamiento y estrangulación de los imperialistas. Muchas personas lo consideraban una cosa increíble.
Pero se quedaron convencidas de lo mismo presenciando maravillas acaecidas en poco más de 10 años en Corea: toma de dominio de CNC, tecnología de punta para la industria mecánica y su introducción en todos los sectores de la economía; el establecimiento del nuevo sistema de producción de hierro basado en las materias y la tecnología autóctonas; la modernización de la industria de vinalon; la producción de abonos mediante la gasificación de la antracita; la construcción de 100 mil viviendas en la ciudad de Pyongyang y otros edificios monumentales a lo largo y ancho del país, y un salto trascendental que se da en el mejoramiento de la vida población.
De más decir está que esto no es sino el resultado del proyecto y la orientación del Comandante Supremo Kim Jong Il, máximo dirigente de la Corea socialista.