El proyecto de fundación de la República Confederal Democrática de Coryo fue propuesto por el Presidente Kim Il Sung en el VI Congreso del Partido del Trabajo de Corea celebrado en octubre de 1980.
El proyecto consiste en fundar una república confederativa en la que el Norte y el Sur, sobre la base del reconocimiento y tolerancia recíprocos de las ideologías y regímenes existentes, instituyan un gobierno unificado nacional con participación igualitaria y, bajo la jurisdicción de este gobierno, ejerzan autonomía regional con iguales facultades y obligaciones, es decir, un país confederativo basado en una nación, un Estado, dos regímenes y dos gobiernos.
La prolongación de la escisión nacional impuesta por fuerzas foráneas exige urgentemente lograr cuanto antes la reunificación mediante una vía racional aceptable para todos coreanos. De ahí que el proyecto arriba citado se puede decir que es un remedio racional conforme con la situación concreta de Corea.
Lo importante en lograr la reunificación del país es aclarar su posición ante la realidad de que existen diferentes ideologías y regímenes en el Norte y el Sur, o sea optar por la vía de unificar ideologías y regímenes o la de dejarlas intactas. Durante más de 60 años ambas partes han venido manteniendo ideologías y regímenes diferentes, por lo cual si una parte intenta absorber a otra eso profundizará la división y traerá irrevocable desastre a la nación. La causa por la reunificación coreana es, en esencia, reanudar el lazo sanguíneo cortado por fuerzas extranjeras, fortalecer vínculos fraternales y lograr la unidad pannacional. Precisamente el sistema confederal permite alcanzar la reintegración nacional dejando intactos diferentes ideologías y regímenes.
El proyecto de reunificación basado en el sistema confederativo encarna los tres principios de la reunificación nacional: la independencia, la reunificación pacífica y la gran unidad nacional.
El Estado confederal es un país que se establece de modo independiente por los coreanos. Al optar por la vía de fundar la república confederal no tendrán las fuerzas foráneas algún pretexto para inmiscuirse en el asunto de la reintegración nacional de Corea, por consiguiente la reunificación se logrará de modo independiente. El reconocimiento y tolerancia recíprocos de diferentes ideologías y regímenes posibilitan alcanzar la reunificación por vía pacífica sin enfrentamiento sangriento, y lograr la confianza y unión eliminando el malentendimiento y desconfianza.
El proyecto también asegura de modo igual los intereses de todas clases, capas y facciones del Norte y el Sur. Refleja imparcialmente sus intereses sin hacer que cualesquier parte, clase y fracción se los vieran perjudicados.
La imparcialidad de ese proyecto se patentiza en el principio de organización y composición del Estado confederal. Según él el Norte y el Sur organizan el gobierno nacional unificado con la participación igualitaria, lo cual permite reflejar de modo imparcial en las políticas estatales la opinión y demanda de todos los coreanos del Norte, el Sur y en ultramar.
El Estado confederal tiene como su función respetar y defender los intereses de la nación coreana y materializa el principio de imparcialidad en su administración. Los gobiernos regionales ejecutarán políticas independientes dentro del marco de conformarse con los intereses fundamentales y la demanda de toda la nación.
Si se logra la reunificación coreana por vía confederal la nación coreana alcanzará la gran unión nacional estableciendo la soberanía en el ámbito nacional y Corea se hará un Estado reunificado independiente, pacífico y neutral.
Ho Kwang Sop